domingo, 19 de octubre de 2014

JAZZTHERAPHY 7: BÉSAME MUCHO

Es innegable que, cuando uno va al cine, se sienta en la butaca a ver una película y en ella se cuece directa o indirectamente una historia de amor, estamos deseando que llegue el desenlace del beso. No hay historia si no hay beso. Los anales del cine están repletos de esos besos eternos. Aquel primer y dulce beso de Maucalay Culkin en Mi chica, el apasionado y esperado de Bogarth y Bergman en Casablanca, el tórrido entre Burt Lancaster y Déborah Kerr en De aquí a la eternidad, tirados semidesnudos en la arena de aquella paradisíaca playa, el mágico entre la prostituta Roberts y el magnate Gere de Pretty Woman, o aquel imposible y boca abajo entre Spiderman y su amiga bajo la incesante lluvia. ¿Quién no ha vivido uno de esos besos de película?


Pero ¿por qué besamos y por qué nos seduce tanto un beso?

Evolutivamente parece provenir de la costumbre de los primates de alimentar a sus crías con la boca y de consolarlas así cuando no había alimento. En la actualidad es una manera de demostrar nuestro afecto.

Tras este gesto cotidiano, se extiende toda una red fisiológica, química y neuronal. Con un beso de tres minutos se ponen en marcha alrededor de treinta músculos faciales, diecisiete de ellos relacionados con la lengua, se intercambian gran cantidad de sustancias, gérmenes y bacterias, y se gasta una media de quince calorías. Pero lo más increíble del beso es que crea adicción. El cerebro es adicto a la oxitocina, la hormona liberada cuando nos besamos, que es la misma que influye en el enamoramiento, el orgasmo, el parto y el amamantamiento. Está asociada a la ternura, al placer y a la afectividad, y crea vínculos a medio y largo plazo. También sube la dopamina, aumentando el deseo, y la serotonina, potenciando la obsesión. Una droga, vamos. Y cuidado, porque si el beso va mal, se libera cortisol, la hormona del estrés, que puede hacer acabar con la relación a las primeras de cambio, en un proceso casi darwiniano de selección natural.


Además, cuando besamos, cerramos los ojos y unimos nuestros labios con los de nuestra pareja con un abrazo apasionado, nuestras pulsaciones suben de sesenta a ciento treinta, se libera adrenalina, nuestro colesterol baja y se refuerza nuestro sistema inmunitario. Las madres que besan mucho a sus hijos aumentan sus defensas y les protegen de enfermedades.

Empezar el día con un beso nos aporta más energía vital y nos predispone a una actitud más positiva. El beso tiene un poder terapéutico y psicológico, y es una demostración de afecto, amistad y cariño. Es decir, el beso nos hace vivir mejor y más. Según el investigador alemán Arthur Szabo de la Universidad de Ontario, sostiene que las parejas que se despiden con un sentido beso antes de ir al trabajo son más felices y ganan cinco años en su esperanza de vida.

Desde la sección Jazztheraphy de "Una botica en las nubes" te animamos a besar más y mejor, y para ello, te proponemos una versión jazz del clásico "Bésame mucho", a cargo de los españoles Joan Chamorro y la jovencísima Andrea Motis.

Besa, besa mucho.  Disfrutad y sed felices. Te esperamos aquí, en las nubes.

https://www.youtube.com/watch?v=k7FI2pW5hGk

"Feeling good" de Joan Chamorro y Andrea Motis



domingo, 14 de septiembre de 2014

THE BIG BANG THEORY

En la Antigüedad, intelectuales griegos y romanos dedicaban gran parte de su tiempo a la observación del universo. Fue así como surgieron las primeras leyes matemáticas y físicas. ¿Quién no recuerda el Teorema de Thales, con sus circunferencias y sus ángulos? ¿O quién no ha bromeado con los catetos y la hipotenusa de Pitágoras? ¿Y quién no ha experimentado el peso del volumen del fluido que desaloja una bañera al meterse dentro, gracias al Principio de Arquímedes?

Más tarde, a partir del Renacimiento, Copérnico nos sacó del centro del universo para poner al Sol; Galileo hablaba de velocidad y aceleración; y por fin, Newton mordisqueaba una deliciosa manzana roja cuando formulaba su famosa ley de la gravedad.

Teoría de la relatividad y Albert Einstein. El átomo de Rutherford. La física cuántica de Eistein, Planck y Bohr. Así sucesivamente hasta llegar al "bosón de Higgs" o partícula de Dios, que es lo que está de moda en estos momentos.


Desde "Una botica en las nubes" queremos volver a formular algunas  leyes de la física, y proponeos una serie de enunciados que harán que la energía, el espacio y el tiempo adquieran otra dimensión en vuestro universo. Os ayudarán en la consecución de vuestros sueños. Es nuestra particular "Big Bang Theory":


1. AUMENTAR EL ESPACIO AUMENTA LA ENERGÍA. Crear más espacio en tu vida es una de la formas más sencillas de aumentar tu energía. Despeja el terreno en la casa, en el trabajo, en la vida social. Elimina aquello que esté caduco, que no sirve, que esté obsoleto. Si al final de un día agotador llegas a casa y está todo desordenado y caótico, créeme cuando digo que te sentirás más cansado que si ves todo espacioso y en orden. Acaba con el CAOS y verás cómo el nivel de tu batería vital aumenta considerablemente. Dice un proverbio chino que "Satisfacer tus deseos con posesiones es como apagar un incendio con una caña de bambú".

2. TEORÍA DE LA ATRACCIÓN. Lo semejante atrae a lo semejante. Más energía atrae más energía, así que cuanta más tengas a tu disposición más atracción ejercerás y más éxito tendrás en todos tus ámbitos. Lo positivo atrae lo positivo. La psicóloga Barbara Fredikson asegura que si invertimos el índice 1:4 (una emoción positiva por cuatro negativas), en 4:1, nuestra mente será más creativa, más innovadora y más adaptable a los imprevistos. Ya sabes, PIENSA EN POSITIVO.

3.  GESTIONA EL TIEMPO. Menos es más. Muchas personas piensan que el hecho de estar siempre ocupadas y tener una agenda sobrecargada es señal de éxito, y lo que ocurre es que al estar tan ocupadas, no tienen tiempo de darse cuenta de lo que ocurre a su alrededor y pierden grandes oportunidades. Deja de tratar de hacerlo todo y aprende a delegar tareas. Pide ayuda cuando sea necesario. Aprende a decir "no" y dilo muy a menudo. Utiliza tu tiempo en llegar a tus objetivos y obtener paz interior. A veces un merecido descanso es la mejor manera de conseguirlo.

Desde "Una botica en las nubes", feliz semana.











domingo, 1 de junio de 2014

CONTAGIANDO ILUSIÓN

El pasado lunes, la Cooperativa de Farmacéuticos de Las Palmas, COFARCA, nos obsequió con una apasionante jornada sobre Marketing, Motivación y Risoterapia. La guinda al pastel la puso el siempre enérgico Luis Galindo, un prestigioso conferenciante con más de treinta años de experiencia en puestos directivos y ponente de afamadas escuelas de negocios, universidades y grandes empresas, tales como Telefónica, La Caixa, Iberia o Iberdrola. Pero, sobre todo, él se define como un enamorado de las personas y como impulsor del movimiento REILUSIONARSE.

Luis Galindo
Al igual que uno entrena los músculos para estar más fuerte, más en forma, y entrena la mente para tener más agilidad, Galindo habla de entrenarnos para ser felices, de ilusionarnos con una vida plena cargada de positividad y felicidad. Nos propone construirnos un futuro mejor basado principalmente en cuatro pilares fundamentales:



Abre los ojos y sé curioso
Pon inquietud en mejorar y aprender. Presta atención a todo lo que te rodea, cambia las gafas de ver la realidad y enfoca hacia el lado positivo. Todo ello nos mantiene jóvenes. Si piensas que algo es imposible, ni siquiera lo intentarás; si piensas que es difícil, será un acicate para hacerlo realidad. Y lo más importante, pregúntate si lo que haces ahora te conduce a donde quieres estar mañana.



Sé la mejor versión de ti mismo. No podrás vivir con auténtica pasión si te conformas con una vida menor de la que eres capaz de vivir. Si puedes ser un trabajador ocho, no te conformes con ser un trabajador siete. Si eres un amigo seis, no te conformes con ser un amigo cinco. Si eres un amante siete, no te conformes con ser un amante seis. No significa ser perfecto (no es ser de diez), significa dar todo lo que puedas para ser la mejor versión de ti. Vete a la cama satisfecho por todo lo que diste hoy.

Busca la excelencia. Pon el cien por cien de tu corazón en lo que estés haciendo en cada momento. Fluye, haz que el tiempo pase volando porque disfrutas lo que estás haciendo. Cada minuto vívelo a tope. Sabrás que es difícil, pero ningún camino llano conduce a la cumbre. La mayor recompensa a nuestro trabajo no debe ser lo que nos pagan, sino aquello en lo que nos convierte. Pon actitud en lo que hagas. Lucha por tus sueños.

Cárgate de entusiasmo e ilusión. A veces las personas más cercanas, pensando que nos ayudan y nos protegen, nos podan las ramas del entusiasmo colocándonos etiquetas de las que luego nos costará años deshacernos ("Tú nunca lo has hecho así", "Eres muy torpe para eso", "Eres demasiado miedica, no podrás"). No permitas que nadie te robe tu ilusión. Elige bien con quién te relacionas; huye de los vampiros, los negativos y los "excusicas". Recupera el placer de conversar por conversar, manifiesta lo que sientes, saborea la vida y sé agradecido. Y, sobre todo, pon amor en todo lo que hagas, es de las pocas cosas que crece si se reparte.

Déjate contagiar por las personas ilusionadas, pon ilusión en tu vida y contagia tu entorno. REILUSIÓNATE CON LA VIDA.

Gracias, Luis Galindo, por contagiarnos de tu energía y tu ilusión.


Este post intenta ser un resumen de lo más destacado de las casi tres horas de conferencia con que nos obsequió Galindo. Para más información:

http://www.luisgalindo.com
https://www.facebook.com/luisgalindooficial/info

domingo, 11 de mayo de 2014

UN COHETE HACIA MARTE

La historia del cine está plagada de películas de ciencia ficción que, en mayor o menor medida, obtuvieron un éxito reconocido. A finales de los sesenta apareció la cinta del genial director Stanley Kubrick 2001, una odisea en el espacio, que marcó el inicio de un estilo de comunicación visual con revolucionarios efectos especiales, vanguardistas proyecciones y un gran realismo científico; y en el que se trataban temas como la inteligencia artificial, la tecnología y la vida extraterrestre. Luego vendrían títulos como la interminable Star Trek, la fantástica saga de La guerra de las galaxias o la adorada Blade Runner. En ellas, la humanidad tenía que hacer frente a extraños seres de otros planetas en un futuro oscuro y hostil, hasta que apareció el tierno y entrañable E.T. el extraterrestre. ¿Quién no lo hubiese subido también a la cestilla de su bicicleta para salir volando hasta su casa?

Los últimos éxitos del género están construidos por ordenador y se narran, entre otras cosas, batallas interplanetarias en tres dimensiones, como el caso de Avatar, o angustiosas vueltas a casa desde el transbordador espacial, como en la oscarizada Gravity.

Desde Una botica en las nubes sabemos que se nos quedan muchísimos títulos en el tintero (Jurassic Park, Alien, Armagedon, Gattaka, Akira, Final Fantasy, etc.). También entendemos que este tipo de cine tiene su dosis de "frikísimo" y que seguro que algún lector vendrá a pedir explicaciones por no mencionar su película favorita. (Invito a todos a que las comenten). Nuestras disculpas por anticipado. Pero hoy queremos invitarlos al último estreno: Un cohete hacia MARTE, en el que el protagonista partirá en cohete hacia la nubes en busca de sus sueños. El protagonista eres tú y MARTE no es el planeta, sino tu objetivo, tu sueño, tu visión.

En coaching y gestión de empresas, la definición eficaz de un objetivo viene dada mediante el método SMART (en inglés), que son las siglas de S (Specific), M (Measurable), A (Achievable), R (Relevant) y T (Time bound). Desde Una botica en las nubes nos gusta nombrarlo en español, MARTE, para que sea fácil de recordar:


M. (Medible): La definición de nuestro sueño tiene que poder medirse. Si quisiéramos perder peso, es menos medible decir "voy a ponerme a dieta", que planificar "voy a ponerme a dieta haciendo cinco comidas de pequeñas cantidades, haciendo ejercicio diario, para perder trescientos gramos a la semana".  Nuestro objetivo es más visual de esta forma.

A. (Alcanzable). Es vital que parezca realista, evitará posibles estancamientos. Siguiendo con el mismo ejemplo, parecería menos alcanzable decir "tengo que perder diez kilos en un mes porque tengo una boda", que decir "voy a ir paso a paso, e intentar perder un kilo al mes, comiendo sano y haciendo ejercicio".

R. (Relevante).  Si nuestro objetivo no es importante para nosotros, no es relevante, careceremos de motivación suficiente para afrontar el reto. Si nuestros kilos de más no nos importan, porque somos felices con ellos y no afectan a nuestra salud, seremos incapaces de continuar con el objetivo. Es posible que ese no sea nuestro objetivo y no debemos gastar nuestra energía en él.

T. (Acotado en el tiempo). Nuestro objetivo, nuestro sueño o nuestra visión tiene que tener una fecha de comienzo y otra de caducidad. No es lo mismo decir "necesito perder diez kilos y voy a ponerme manos a la obra" que "mañana empiezo con la dieta con un coach nutricional y ya me he apuntado al gimnasio para ir cuatro veces en semana; voy a perder trescientos gramos a la semana para perder diez kilos en un año y no ganarlos nunca más". Lo importante es comenzar, iniciar la acción y ser constante en perseguir nuestros sueños.

E. (Específico). Quizás sea el más importante de todos y consiste en definir sin lugar a equívocos cuál va a ser nuestro objetivo. Si el objetivo es demasiado ambicioso, lo mejor es subdividirlo en varios más pequeños. Para "perder peso" sería mejor planificar "esta semana ya tengo mi dieta escrita: cinco comidas. Voy a ser fiel a ellas y, además, voy a guiarme de lo que me diga mi entrenador personal. Necesito correr todos lo días un poco".

Y recuerda: tus sueños no están sacados de una película de ciencia ficción, pueden ser reales solo si te lo propones. Cuando te plantees un objetivo en la vida, enciende los motores del cohete, vente con nosotros a las nubes y no te olvides de hacer escala en MARTE.

Feliz semana.


miércoles, 30 de abril de 2014

JAZZTHERAPY 6: FELIZ DÍA INTERNACIONAL DEL JAZZ

Por todos es sabido que la música es capaz de transportarnos a un estado de ánimo, a una emoción. La música es capaz de hacernos mover los pies y bailar de alegría, otras ponernos melancólicos o románticos, y otras nos hace llorar de tristeza. En esta "botica"descubrimos un día que en el cielo de los soñadores, entre nube y nube, no hay un angelito con su arpa amenizando a los presentes. Sabemos que la música que suena de fondo proviene de un saxofón, un contrabajo o un piano. Desde "JAZZTHERAPY" siempre predicamos la toma de conciencia de las emociones para cambiarlas cuando no nos interese. Es la inteligencia emocional. Y en "Una botica en las nubes" nos emocionamos con el jazz.


Daniel Franco: Moonlight SerenadeHoy,
Hoy, 30 de abril es el Día Internacional del Jazz, y desde aquí queremos celebrarlo escuchando jazz. Seguro que en su ciudad hay alguna actividad programada para esta tarde noche. Vayan, y fluyan. Nuestro homenaje es para el "rag time", dónde empezó todo, y a Jerry Roll Morton.



PD: La obra pictórica es de mi gran amigo Daniel Franco. Si bueno es pintando, mejor es cómo persona. Tienen que conocerlo. El próximo 16 de mayo, en Ayamonte, en el patio de la Casa Cuna, expondrá su colección basada en el jazz "Rhapsody in blue". Aquí una muestra.

Daniel Franco: Rhapsody in blue


domingo, 27 de abril de 2014

LADRONES DE TIEMPO

¡ATENCIÓN, ATENCIÓN!

Aviso policial. Peligrosa banda de "ladrones de tiempo" anda circulando por los alrededores de la ciudad.


De apariencias muy distintas, actúan sigilosamente, entran en las vidas de los conciudadanos, se aproximan a ellos y les desvalijan todo el valioso tiempo que poseen. La "víctima tipo" es aquella que se queja a menudo de no tener tiempo para nada. Su radio de acción va desde el trabajo hasta la propia vida cotidiana.

Los más comunes tienen imagen humana. Son fáciles de reconocer porque se acercan en forma de visitas inesperadas e interrupciones telefónicas. Con el propósito de preguntarnos algo aparentemente importante (luego no lo es tanto), detienen lo que estamos haciendo y no desaparecen de nuestro lado hasta mucho tiempo después. Luego tenemos que volver a empezar lo que estábamos realizando.

Otros ladrones de tiempo adoptan formas inespecíficas. Vestidos de negro y con antifaz, aparecen la falta de planificación y la "no definición" de objetivos. El desorden y el aplazamiento ineficaz de tareas también roban al cronómetro esas horas vitales. También trabaja de caco la falta de control en la toma de decisiones.

Pero los más peligrosos son aquellos que se mimetizan con el propio incauto, influyendo en su comportamiento, convirtiendo también en ladrón al pobre apurado. Son el estrés, la fatiga, el cansancio físico y psicológico. También determinado tipo de conductas como el no saber decir "no", los problemas en delegar y pedir ayuda cuando realmente es necesaria y el perfeccionamiento excesivo.


La policía recomienda activar las alarmas, no quejarse por no tener tiempo y tomar las siguientes medidas de protección para optimizarlo mejor:

-   Adoptar técnicas de gestión eficaz del tiempo (identifica la pérdida de tiempo, los problemas relacionados con ella y cómo solucionarlos).

-   Formular objetivos y establecer prioridades (importantes, urgentes, poco importantes, poco urgentes).

-   Planificar a corto, medio y largo plazo.

-   Controlar las interrupciones y aprender a "decir no".

-   Delegar tareas o pedir ayuda cuando sea necesario.

-   Tener una vida saludable (haz deporte, aliméntate sano y descansa lo necesario).

-   Utilizar recursos tales como agendas, ordenadores, teléfonos para programar las tareas (aunque cuidado, porque su uso inadecuado puede dar lugar a un nuevo ladrón de tiempo).


No pongas más esa excusa de "no tengo tiempo". Es tu deber ciudadano que desaparezcan los ladrones de tu vida. Activa tus alarmas. Mientras, te esperamos aquí, en las nubes.





domingo, 13 de abril de 2014

JAZZTHERAPHY 5: ESTADOS DE FLUJO

Al principio las abuelas se pasaban las tardes enteras entre agujas del ocho y madejas de lana. Disfrutaban preparándonos una "bufandita" para el frío o unos patucos de hilo para el nieto que acababa de nacer. Rosa, si era niña; "azulitos", si era niño. Era mucho antes de que se inventaran las telenovelas.

Luego, nuestros padres descubrieron que con el TP, esa  minúscula revista en la que te avanzaban la programación de toda la semana, venían unos pasatiempos. Sopas de letras, crucigramas en blanco, dameros y, mis favoritos, los jeroglíficos. Cuanto más difíciles eran, más orgullosos estábamos de resolverlos.

Hoy en día tengo un amigo al que le siguen encantando los sudokus, ese juego matemático que no falta en ningún periódico y en el que hay que colocar dígitos por todos lados. Se prepara minuciosamente. Se sienta, se sirve una copa de vino, se pone música de fondo y se puede pasar toda la tarde de un domingo ensimismado entre esos cuadraditos con números. Lo que empezó como una pequeña curiosidad sin más, se ha convertido en un acto de evasión y disfrute.

Todos ellos tenían algo en común. Cuando les preguntaban por qué lo hacían, te respondían lo mismo. "Yo soy feliz así".


Punto macramé, pasatiempos y sudokus. Montar puzles, tocar un instrumento, practicar deporte o hacer manualidades. Son actividades cotidianas que nos producen gran satisfacción y gozo. Según el catedrático en neurociencias Mihaly Csikszentmihalyi, uno de los padres de la psicología positivista, todos ellos están realizando una experiencia óptima y entrando en un "estado de flujo", algo que podría interpretarse como la felicidad.

El estado de flujo es la capacidad de concentrar toda la energía psíquica y la atención en una actividad que hemos elegido nosotros mismos y que nos produce disfrute y placer. Son esos momentos en los que una persona está tan absorta en lo que hace que se olvida de repente de sí misma y de todo lo que acontece a su alrededor. Está en un estado de felicidad y creatividad, y siente una sensación de profunda alegría.

Una experiencia óptima necesita de cierto grado de complejidad, que centremos nuestra atención en lo que hacemos, y que pongamos toda nuestra experiencia y habilidad en el desarrollo de la actividad. Para lograrla, tenemos que mantener ordenada nuestra conciencia y controlarla en todo momento. Seguro que hay una actividad que te encanta y te apasiona, en la que pareces flotar. Aquella en la que te olvidas del mundo. Extrapólala a tu vida en general. Lleva tu estado de flujo al trabajo, no solo a tu tiempo libre. Mantén unos objetivos claros, gestiónalos adecuadamente y recibe un feedback positivo. Son las claves para flotar, para fluir.

Fluye. Yo te espero en las nubes. Fluida semana.

Y para que consigas un momento "flow" te propongo que acompañes aquello de lo que estás disfrutando con un poco de jazz. Pat Metheny es un guitarrista estadounidense considerado uno de los grandes. Con innumerables premios, entre ellos veinte Grammys, ha colaborado con gente como A. C. Jobim, John Scotfield, Milton Nascimiento, Enrique Morente o Brad Meldhau.
En España se ha dado a conocer algo más recientemente por recibir el Goya a la mejor música original por la película de David Trueba Vivir es fácil con los ojos cerrados.


 
Pat Metheny: "One quiet night"



domingo, 30 de marzo de 2014

DECÁLOGO DEL PERFECTO "MASTERCHEF"

La televisión está repleta de programas de cocina. No hay cadena que no tenga un hueco para un "gordinflón" y sus fogones. En unos, aficionados a la vitro intentan mejorar su espíritu cocinillas; el premio, colocan tu ego en un pedestal con la publicación de un libro con tus propias recetas. En otros, cocineros expertos se juegan su prestigio para ser el mejor del país a expensas de que un maestro mediático y gruñón deje tus vergüenzas al descubierto. Las madres de unos cocinan mejor que las abuelas de otros, reza el título de uno de ellos. Estos se adueñan de las tapas y aquellos del postre. Programas americanos, ingleses o nórdicos. De tartas de boda extravagantes o de magdalenas de colores con nombres extraños. Y sobre todos ellos, en un mundo aparte, está Arguiñano. Él sembró y abonó el terreno con su humor y saber estar para esta recolecta actual. ¡Si hasta los niños de primaria piden para Reyes un juego de cuchillos cerámicos de última generación!

Caricatura: Tonay
Desde Una botica en las nubes queremos ofrecerte el manual definitivo para que puedas presentarte en la vida como un perfecto Masterchef y que las recetas que salgan de tus fogones estén llenas de energía y vitalidad. Son estas:

1. Mantén en orden tu cocina. Al igual que un cocinero no debería trabajar en una cocina desordenada, nosotros tendríamos que borrar de nuestro lado todas aquellas molestias que nos fastidian. Son esos pequeños inconvenientes los que absorben nuestra energía y reducen nuestra capacidad de tener éxito. No los soportes, simplemente elimínalos de tu vida. Cose el botón que te falta, arregla ya la bombilla del baño pequeño, cambia las escobillas del parabrisas. Ordena tu entorno. 

2. Controla tus fogones. Suprime los escapes de energía eliminando tus adicciones y vicios. Hay actividades que nos dejan sin energía. Ver la televisión, el smartphone, el tabaco, la cafeína, el juego, las relaciones tóxicas. Tú conoces tus adicciones. Contrólalas. La fórmula es fácil. Elimina aquello que te roba energía, tendrás más para hacer aquello que deseas. 

3. Elige los mejores ingredientes. Siempre oyes decir que la materia prima debe ser la mejor, que eso es éxito asegurado. Jamón de Jabugo, gambas de Huelva, chuletón de Ávila. Cambia en tu vida los malos ingredientes, los malos hábitos, y busca en el mercado los mejores, las buenas costumbres. Rodéate de ellas a diario. Te saldrá siempre una receta perfecta. Escribe tu lista de diez pequeños placeres diarios y disfrútalos cotidianamente.

4. Renueva tus recetas que ya no gustan, apuesta por la cocina moderna. La carta de un buen restaurante cambia constantemente para no aburrir ni al cocinero ni a la clientela. En tu vida haz lo mismo. Si hay fórmulas que no funcionan, cámbialas por otras. Elimina los "deberías" de tu vida. Son aquellas cosas que crees que son un objetivo en tu vida, pero no haces nada para ir a por ellas. Absorben energía. Transfórmalas de forma que resulten positivas, haz cocina fusión.

5. Tú eres el chef, hazte respetar. Establece unos límites firmes en tu vida. Los comentarios despectivos, los cotilleos superfluos y las agresiones verbales te disminuyen, consumen tu energía y reducen tu capacidad de atraer aquello que deseas. No los toleres. Nadie puede hacer que te sientas inferior si tú no se lo permites.

6. Usa un vestuario elegante. En la cocina hay salpicaduras, podemos usar un plástico, como en los bares de menús del día, o usar un traje topchef. Para protegernos de los comentarios desagradables, podemos usar ese plástico, pringándonos de la misma grasa que nos mancha, o podemos hacerlo con elegancia, usando la regla de los cuatro pasos: informahaz ver que te están "agrediendo", pide por favor que dejen de hacerlo, insiste y, finalmente, vete.  No entres en discusión. Mantén la calma y usa un tono neutro de voz.

7. Cuidado con el ingrediente más pequeño. No ignores lo pequeño. Una pizca de sal de más puede que no se note, muchos granos estropean un plato. No dejes que un pequeño comentario insignificante se convierta en una montaña y explotes.

8. Innova. Busca cada día nuevas recetas. Cuando tengas tus buenas recetas, no te conformes. Eleva el nivel a recetas excelentes. Innova, crece, sé curioso, investiga, adapta a tu forma las recetas de los clásicos, de las personas que admiras.

9. Del cerdo se aprovecha todo. Las manitas del cerdo, las orejas, la carrillera, la sesada. De aspecto desafortunado, son deliciosos al paladar. Aquello que nos parece detestable, doloroso o dañino puede ser una fuente de belleza o de fuerza si lo encaramos con positividad. Hay quien levanta muros con vientos de cambio para defenderse y hay quien construye molinos para aprovechar la inercia de Eolo. ¿Qué prefieres ser?

10. Salpimienta tu vida, pon ilusión. La sal y la pimienta son el toque perfecto para redondear un plato. Necesitas cosas que te ilusionen y no solo un viaje de vacaciones al año o ese traje caro del escaparate. Haz que cada día de tu vida sea algo especial. Salpimienta tu vida. Pon ilusión en todo lo que hagas. Te darán un plus de energía. Son las vitaminas del plato. Vitamínate.

Monta tu propio restaurante topchef aquí, en las nubes. Te esperamos con la mesa puesta y con mucha hambre.

Feliz semana.

domingo, 23 de marzo de 2014

EL PIJAMA DE SUPERMAN

Un incendio en lo alto de un rascacielos, un atracador intentando robar a una pobre ancianita, la mayor banda de ladrones asaltando Metrópolis o un trío de malvados humanoides llegados del espacio exterior dispuestos a apoderarse del mundo. Nada podía detener a Clark Kent después de salir de aquella cabina telefónica. Antes, dentro, tiraba la chaqueta y el pantalón al suelo, se sacaba la corbata mientras se quitaba las gafas, se acicalaba el flequillo y se quedaba en pijama. O eso nos parecía a todos. Ese pijama azul con calzón, botas y capa roja transformaban al asustadizo periodista en un magnífico superhéroe llegado del planeta Kripton. Es un pájaro, es un avión... No. Es Superman.

Si esa cabina telefónica hablara, nos contaría cómo un hombre miedica, con poco respeto por sí mismo, cobarde y simple se convertía en un ser seguro, audaz y convencido de su labor en el mundo. Y la diferencia entre una identidad y la otra era únicamente el traje. Un traje de superhéroe que le hacía capaz de cualquier cosa: de caminar por las aguas, de detener a malvados, de volar e incluso de volver atrás en el tiempo. Todo aquello que se proponía. Eran sus superpoderes.


Se piensa habitualmente que un soñador (alguien capaz de convertir sus sueños en realidad) es una especie de superhombre. Un ser capaz de conseguir todo lo que se proponga y que tiene superpoderes para que todo le salga bien. Pues bien, ya puedes ir buscando en el almacén de tu vida un traje parecido, porque ser un superhéroe hoy en día está al alcance de cualquiera. Todos tenemos guardada en alguna cómoda una malla azul ajustada llamada ACTITUD, que es la que nos hace confiar en nosotros mismos y en los demás. Aquella que hace rebotar las balas cuando llegan los problemas y afrontar los retos de una manera positiva. Rebusca entre los cajones porque seguro que encuentras algún calzón rojo con los VALORES que te guiarán para conseguir tus deseos. Como Superman, lleva el amor, el respeto, la confianza, el humor, la sinceridad y el compromiso adosados como una "S" a tu pecho. Serán tu insignia. Seguro que en el zapatero encuentras tus CREENCIAS en forma de botas rojas. Son aquellas que te harán pisar fuerte, aquellas que te darán seguridad y que te harán creer en ti. Repítete a menudo que tú eres el protagonista de la película de tu vida. Y por último, en lo más alto del armario, entre el resto de cosas, casi escondida, está tu capa. Son tus HABILIDADES, aquellas que crees que no tienes, pero llegaron contigo desde el planeta Kripton. Solo tienes que descubrirlas, al igual que Superman cuando llegó de la cueva del hielo. Busca la curiosidad, ten iniciativa, resuelve, date palmaditas en la espalda por lo bien que lo haces, cuestiónalo todo, no te quejes por costumbre y provoca tu futuro. Cuando la creencia y la querencia coinciden, llega la magia.

Ya solo falta repeinarte el flequillo y encontrar esa cabina de teléfono. Tienes los superpoderes necesarios para llegar a tus sueños. Y ahora que sabes volar, te espero aquí, en las nubes.

Feliz semana, Superman.

domingo, 9 de marzo de 2014

JAZZTHERAPY 4: CINCO HABILIDADES EMOCIONALES. ¿LISTO TONTO O TONTO LISTO?

Ataulfo, Sigerico, Walia, Teodoredo, Turismundo, Teodorico… Leovigildo, Recaredo I, Liuva II... Égica, Witiza y Rodrigo.

Sí, la famosa lista de los reyes godos. El tópico de la educación en España que hacía referencia a la prueba memorística en la que había que recordar los treinta y tres reyes del periodo visigodo en España. Luego estaban los ríos de la península: Miño, Ebro, Duero, Tajo, Júcar, Guadiana, Segura y Guadalquivir, y el resto de afluentes con sus subafluentes. Podrían ser, irónicamente, algunos de los test que se hacían para hallar el cociente intelectual (CI) de un individuo en la escuela. Ese numerito habría de acompañarte el resto de tu vida. Si era bajo, tenías que dedicarte a ir a la mina o al campo, y, si era alto, eras un superdotado. Solo faltaba que te pusieran una “S” en el pecho, una capa y te sacaran en volandas por el colegio. Eras un bicho raro, hablando en plata. Años más tarde, se demostraba que muchos alumnos superdotados y afortunados en la genética del CI, eran incapaces de adaptarse a la vida; mientras que algunos “mineros” obtenían unas cotas de felicidad por encima de la media. El mundo al revés. El listo tonto y el tonto listo.

La respuesta está en que la inteligencia académica no podía, ni puede, explicar la vida emocional, y un resultado escolar excelente no asegura un triunfo en la vida cotidiana, tan pasional e impulsiva. En el mejor de los casos, el CI parece aportar solo un 20% de los factores determinantes del éxito, mientras que el 80% restante depende de otros factores. Fue entonces cuando surgió el término de INTELIGENCIA EMOCIONAL. 

Históricamente, los términos "emoción" e "inteligencia" han sido términos totalmente contradictorios, pero ¿pueden las emociones ser inteligentes? Autores como Daniel Goleman en La Inteligencia Emocional, uno de los padres de la materia, hablan de HABILIDADES EMOCIONALES para afrontar sabiamente las relaciones humanas, así como para comprender nuestras propias capacidades para reconocer nuestros sentimientos. Estas habilidades son:

Ilustración: Olga Diaz Prieto

1.   AUTOCONOCIMIENTO. La capacidad de reconocer un sentimiento en el mismo momento en el que aparece es la piedra angular de la inteligencia emocional, que resulta vital para la comprensión de uno mismo. Las personas que identifican sus emociones, las admiten y las controlan suelen ser dueñas de sus propias vidas y no están sometidas a ellas.

2.   AUTOCONTROL. La conciencia de uno mismo es una habilidad básica que permite controlar nuestros sentimientos y adecuarlos al momento. Tranquilizarse, dominar la ansiedad, la tristeza y la irritabilidad permiten recuperarse antes de los reveses normales de la vida a los que poseen autocontrol que a aquellos que carecen de esta habilidad.

3.  AUTOMOTIVACIÓN. El control de la vida emocional y su subordinación a la consecución de un objetivo resulta primordial para incitar y mantener la atención, la motivación y la creatividad. La capacidad de una persona para permanecer en estado de flujo (el proceso por el que alguien está absorto en una actividad que le produce gran satisfacción, perdiendo incluso la noción del tiempo y de cualquier estímulo externo) provoca más productividad y eficacia para cualquier objetivo o empresa en el que se embarque. La perseverancia y la confianza en sí mismo son otras de las cualidades a tener en cuenta para llegar a nuestros objetivos.

4.   EMPATÍA. La capacidad de reconocer las emociones ajenas es fundamental para sintonizar con el entorno en el que nos movemos, bien sea de forma personal o laboral. Las personas empáticas ven de lejos lo que necesitan o quieren los demás, pudiendo ayudarlos o sacar provecho de ellos. Es fundamental en profesiones como las sanitarias, docencia, ventas o dirección de empresas.

5. CONTROL DE LAS RELACIONES. El arte de relacionarse se basa en la capacidad de entender las emociones ajenas, por tanto está muy relacionado con la empatía. Esto nos hará competentes o incompetentes sociales y nos hará populares, líderes o todo lo contrario. Quienes sobresalen en este apartado suelen ser auténticas estrellas y suelen tener éxito en todas aquellas actividades vinculadas a las relaciones interpersonales.

Pero tranquilo, no es necesario controlar al máximo todas estas habilidades. Solemos tener lagunas en una u otra y pueden remediarse mediante el aprendizaje, el hábito y el esfuerzo. Piénsalo. Yo creo que el esfuerzo será mucho menor que aprenderse la lista de los reyes godos y, hoy en día, la recompensa, mucho mayor.

Sé feliz. Te espero en las nubes.

En esta cuarta entrega de "Jazztheraphy" me gustaría dar cabida al que posiblemente es considerado el mayor saxofonista de todos los tiempos. Charlie Parker fue además el precursor del be-bop junto al trompetista Dizzie Gillespie en la década de los cuarenta, creando un estilo que más tarde copiaría el resto de músicos contemporáneos. Vivió a caballo entre Nueva York y Los Ángeles, y su peligrosa relación con el mundo de las drogas (estaba convencido de que aumentaban su calidad musical) lo hizo perecer muy joven. Que lo disfruten.








domingo, 23 de febrero de 2014

ELEMENTAL, QUERIDO WATSON. OCHO PREGUNTAS PARA LLEGAR A TU SUEÑO


Me imagino a Sherlock Holmes llegando a la escena de un crimen. Su aire altivo y misterioso, sus pasos lentos, su pipa humeante, su gorra a cuadros de cazador inglés, su enorme lupa y su inseparable Dr. Watson. Un muerto, unas pistas, un lugar. En la cabeza del astuto detective muchos interrogantes y mucha paciencia para descubrir al culpable. ¿Qué ha pasado aquí? ¿Quién ha muerto? ¿Dónde ha muerto? ¿Por qué lo asesinaron? ¿Cuándo lo mataron? ¿Cómo ha muerto? Posiblemente su linea de investigación empezaría por esas preguntas.
Hace años me explicaron el método periodístico de las SEIS W. Se trata de una técnica de redacción para desarrollar de la forma más completa posible una noticia. La noticia perfecta. En ella, el periodista investigador debe cumplimentar seis preguntas básicas, que en inglés empiezan por W.

Who (quién), What (qué), Where (dónde), When (cuándo), Why (por qué) y hoW (cómo).

Sherlock Holmes las usó también para descubrir al culpable y saber qué había pasado. Lo tenía claro, sabía qué tenía que preguntarse para llegar a su objetivo, que no era otro que detener al asesino.

Pues bien, en la vida necesitamos hacernos unas preguntas parecidas para llegar a nuestro sueño. Aplícalas cuando tengas un proyecto en marcha, un plan o un objetivo en mente, bien sea personal o laboral. Estas cuestiones son:


Quién. A veces no le damos importancia al hecho de que nuestros sueños son nuestros y no son de nuestro hermano, de la prima de nuestro compañero de trabajo o de la vecina del quinto (o sí, pero ese es otro tema). Tenemos que tener claro que nuestro sueño es nuestro y de nadie más, y que solo nosotros tenemos la llave que abre nuestro destino. Debemos saber, además, que lo que queremos no son los sueños que los demás quieren para nosotros.

Dónde. Es importante situarse, tener un sitio. Ponte en un lugar cómodo y plantéate de dónde vienes, cuál es tu pasado (serán tus armas y recursos para conseguir tu sueño), dónde te encuentras en estos momentos de tu vida y hacia dónde quieres ir. Todos estos "dónde" serán las coordenadas donde dirigir el tren de tu vida.

Qué. Ahora es cuando toca definir tu sueño. Recuérdalo, tiene que ser un objetivo claro, alcanzable, cuantificable, realista y con una duración calculada en el tiempo.


Por qué. Busca la razón verdadera por la que quieres lograr tu meta. Pregúntate lo bueno de llegar a tu sueño, como también lo malo de llegar. Cuestiónate lo malo de no llegar a tu sueño y lo bueno de no llegar. Plantéate todas las opciones. A lo mejor te das cuenta de que salir de tu zona de confort para ese deseo concreto no merece la pena, porque no es realmente tu sueño.

Para qué. Saber en qué se convertirá tu vida cuando llegues a tu sueño te dará fuerzas en el camino. Si de verdad quieres cumplir tu sueño, descubre tu SUEÑO verdadero.

Cómo. Tienes que saber cuáles son los recursos que necesitas para llegar hasta allí, con cuáles cuentas ya, cómo debe ser tu formación, y qué habilidades y destrezas nuevas necesitas para conseguirlo. Tendrás que planificarlo con calma y saber qué tiempo te das para cada cosa.

Cuándo. El no ponerle fecha de caducidad a tu sueño para que sea una realidad ayuda muchas veces a que no te pongas en marcha a comenzarlo. Cuanto más ambicioso sea tu sueño, tardarás más tiempo en conseguirlo, lo que no te exime de marcarlo en el calendario. Otro truco para no caer en la desesperanza de la fecha es subdividirlo en objetivos más pequeños y, por tanto, alcanzables antes en el tiempo. Serán la gasolina de nuestro motor para llegar al final de un largo viaje.

Cuánto. Todo tiene un precio, bien de tiempo o bien de dinero. Para nuestra formación, para nuestras nuevas habilidades. Gastaremos horas y posiblemente también algunos euros. Si no contamos con lo primero, utiliza técnicas de gestión del tiempo; si no tienes el suficiente dinero, tendremos que ver todas las opciones posibles para conseguirlo. Sé creativo, seguro que existe alguna posibilidad de intercambiar alguna habilidad tuya con alguien que tenga otra que tú necesitas. O pedir prestado a tu red de contactos. O ir al banco, pero no desistas, recuerda que es tu sueño y nadie se moverá por ti para conseguirlo.

Ya estás hecho un auténtico detective de sueños. Sabes quién, dónde, qué, por qué, para qué, cómo, cuándo y cuánto. Lo sabes todo para conseguir tu sueño, ¿vas a parar ahora? ¿No te parece elemental, querido Sherlock?

Cree en ti. Yo te espero aquí, en las nubes.


Fuente: "¿Te atreves a soñar?"- Matti Hemmi. 

https://www.youtube.com/watch?v=i07qz_6Mk7g









martes, 11 de febrero de 2014

POLTERGEIST O EL MIEDO

Aún perdura en mi mente la imagen de la pequeña Carol Anne a oscuras frente a un televisor encendido, contactando con unos malvados espíritus. Recuerdo cómo aquella luz procedente del aparato se tragó a la pequeña. Luego vino la médium bajita y su "Ve hacia la luz, Carol Ann", los esfuerzos de la familia por sacarla de no se sabe dónde, el viejo del sombrero negro de dentadura afilada, la excavadora y todo lo demás. Eran los ochenta y aquella película, Poltergeist, causó un gran impacto en la población. Estaba a la altura emocional de El exorcista o El resplandor.


La recuerdo como la primera vez que fui consciente de pasar miedo. Eran miedos infantiles. Como también lo eran el miedo a la oscuridad, el miedo a los monstruos, a los vampiros, a quedarme solo. En etapas posteriores de la infancia y en la pre-adolescencia los miedos se convirtieron en algo más realista: al daño físico, a los médicos, a la sangre, al fracaso escolar o a algún compañero de colegio. En la adolescencia aún perduraban algunos de los miedos anteriores y habría que sumarles otros, derivados de las relaciones inter-personales, del rendimiento académico y deportivo, de la crítica y el rechazo; y con los cambios que se producirían en mi propia imagen. Hoy en día sé que esos miedos eran un fenómeno universal, les pasaba a todos en mayor o menor medida,  y que tienen un importante valor adaptativo de la especie al medio. Miedo al cambio en situaciones desconocidas. Una vez controlabas la situación, aquellos desaparecían.

En la edad adulta nos pasa a veces lo mismo. Tenemos miedo al cambio. Miedo al fracaso, sobre todo los perfeccionistas; miedo al ridículo o a sentirse juzgado; miedo al qué dirán; miedo al éxito; a no tener unos objetivos claros en la vida; miedo a la necesidad de conocer todos los detalles del camino antes de saber incluso cuál es y recorrerlo. Miedo, en definitiva, a salir de nuestra  ZONA DE CONFORT. Son miedos que nos bloquean, nos estancan e impiden que luchemos por nuestros sueños. Al igual que en la primera etapa de nuestra vida, son un fenómeno evolutivo.

El miedo forma parte de la vida y no es un problema en sí mismo. Es natural, es legítimo y necesario. Lo importante es saber reconocerlo, entenderlo y gestionarlo. Para vencer los miedos necesitamos aumentar nuestra autoestima y nuestra autoconfianza. Sube tu autoestima diciéndote cosas como "yo puedo", "lo haré sin problemas" o "soy competente", que harán que realmente tus emociones hacia ti sean positivas; y no te martillees con otras como "merezco lo malo que me pase", "soy torpe y siempre lo he sido". Para elevar tu confianza sincérate contigo mismo, descubre cómo eres realmente y qué quieres cambiar, cumple con los objetivos que te planteas y comprométete a adquirir aquello que te falta (habilidades y conocimientos) para llegar a tus sueños. Así conseguirás que tus miedos disminuyan. Tu "yo real" crecerá hasta tu "yo ideal", a tu "yo auténtico", el que te guiará hasta tus deseos.

Como Carol Anne en Poltergeist, ve hacia la luz, vence tus miedos. Tus sueños están más cerca. Aquí al lado. Te espero en las nubes.

"Hoy es el futuro al que tanto temíamos en el pasado"

domingo, 2 de febrero de 2014

TU CEREBRO 3.0

¡Ding! Te acaba de entrar una notificación de actualización pendiente en tu smartphone. Si eres uno de los diecinueve millones de españoles que miran el móvil 150 veces al día, has tardado cinco minutos como mucho en darte cuenta. Rápidamente compruebas tu nivel de batería, tu estado del wifi, y ¡zas!, aplicación actualizada. Nos da taquicardia si la novedad proviene de Whatsapp, Facebook o  Candy Crash Saga, por mínima que sea, no vaya a ser que nos perdamos el último comentario de mengano, la foto subida de fulano o la nueva bomba explosiva que te hará caer todos los chocolates trepadores del jueguito dichoso. Comprobamos las diferencias entre una versión y la nueva, y nada. Todo sigue igual.



Igualmente ocurre con los ordenadores. Que si versión nueva del Windows 8, que si actualización del Adobe Acrobat, que si el Photoshop no funciona sin la última novedad... Y no digamos del resto de tu vida. Tu vestuario necesita una renovación urgente porque tu ropa no está de moda, es de hace dos temporadas; la televisión del salón solo es de 42 pulgadas y, claro, sabes que tu vecino del quinto se compró un Home Cinema porque lo único que falta es que Denzel Washinton entre por tu puerta y te pida azúcar; y tu coche, por supuesto, ya se va quedando anticuado, no tiene puerto USB.

Si te fijas, todo a tu alrededor está actualizado. Que conste que no es una crítica al consumismo, ese sería un interesante tema de debate que no viene al caso. Pero ¿recuerdas cuándo fue la última vez que revisaste tus pensamientos? ¿De dónde proviene la imagen que tienes de ti mismo? ¿Todavía imaginas que eres de una manera porque alguien te etiquetó hace años? Pues bien, todos esos pensamientos, imágenes y etiquetas son almacenados y procesados por nuestro cerebro. Y si no conseguimos renovarlo, posiblemente estemos usando unos parámetros que provienen de nuestra infancia y nuestra adolescencia. ¿No crees que va siendo hora de actualizar nuestra herramienta más valiosa de trabajo? Es como si a día de hoy trabajáramos con un Spectrum Plus, un Amstrad con pantalla de fósforo verde o el primer Windows 1.0. Obsoleto, ¿verdad?

Buenas noticias. Ya venden al precio irrisorio de la ilusión la última versión de tu CEREBRO 3.0. Se compone de las siguientes herramientas:


ACTITUD: Es la forma que tienes de afrontar la realidad, la manera en que te posicionas frente a la vida. Basa tu actitud en tu relación con los demás. Acéptate como eres, lucha por cambiar las cosas que no te gustan, no te quejes de lo que te pasa si no lo haces, y acepta a los demás como son, aunque no compartas cómo piensan, cómo sienten o cómo actúan.

VALORES: Son aquellos aspectos en tu relación con los demás, con el mundo y contigo mismo a los que les das más importancia. Suelen transmitirse dentro de una misma sociedad y de generación en generación, por eso surgen los conflictos en la adolescencia. Es la época de búsqueda de identidad y de valores propios. ¿Están alineados tus valores con tus objetivos en la vida? Revísalos.

CREENCIAS: Son aquellos juicios o valoraciones que emitimos sobre algo y que no volvemos a cuestionar nunca. A la larga, si no las discutimos jamás, se acaban convirtiendo en "creencias limitantes" o etiquetas que nos impiden crecer y nos frenan en el camino a nuestros sueños. Repasa tus creencias y actualízalas.

HÁBITOS: Son aquellos comportamientos que repetimos de forma automática, sin pensar casi nunca si están bien o están mal. Pueden ser hacer deporte o fumar, comer verdura o carne para cenar, conducir de una determinada manera... No los cuestionamos. ¿Y si adoptamos el hábito de ser felices? ¿Y si adoptamos la costumbre de hacer cumplir nuestros sueños? Se dice que para que un comportamiento sea hábito debe repetirse al menos tres semanas consecutivas. Prueba a decirte todos los días cosas buenas sobre ti, a adoptar una actitud positiva, a dejar de criticarte. Ese sí es un hábito saludable.

FEEDBACK: Es la respuesta que damos al comportamiento de otra persona. La forma de gestionar esto influirá de manera notable en cómo pensaremos, cómo actuaremos y cómo sentiremos. Lo que te ocurre tiene que ver con lo que piensas, sientes y haces; tiene que ver con la dirección en que colocas tu radar; con lo que crees acerca de ti, de la vida y de los demás. Con este nuevo CEREBRO 3.0 aprenderás a gestionar el feedback que no te gusta, ignorando la información que a veces nos perjudica, dejando de sentirte víctima, y ayudándote a aprender y cambiar, preparándote para ayudarte a cumplir tus sueños.

FEEDFORWARD: Imposible de traducir al castellano, es cuando le decimos al cerebro que vamos a hacer algo, antes de que ocurra. Si nos empeñamos en decirle que vamos a tener un día maravilloso, él se fijará en las cosas buenas que ocurren a nuestro alrededor. Si le decimos lo contrario, se fijará  en las malas y hará todo lo posible por que eso ocurra. Casualmente, o no, esto siempre es así. ¿Qué orden prefieres darle a tu cerebro? Tú decides.

En esta nueva actualización, las posibilidades son infinitas y harán trabajar a tu cerebro en la dirección correcta: aquella que te lleve a conseguir tus sueños. Cambia de versión e instala ya tu CEREBRO 3.0. No te arrepentirás.

Te espero aquí, en la nubes.


domingo, 19 de enero de 2014

OBJETIVO PETAZETAS

Aún perdura en mi mente el recuerdo del quiosco de doña Manolita en mi barrio del Parque de la Luz, en Huelva.  Era el típico habitáculo de metal de tres metros cuadrados, inundado por bolsas que contenían infinidad de clases de papas fritas, de pipas, de gominolas y algún que otro juguete. Colgaban paquetes de las ventanas, de la puerta trasera, de los techos. Y allí, en medio de aquel ordenado desorden, apenas iluminada por una bombilla y enfrente de la luz tenue de una tele de antena de cuernos, aparecía la cabecita plateada de doña Manolita.

Por aquel entonces, todos los sábados por la tarde, antes de la película de la primera, mi madre me mandaba al puesto. "Un paquete de Fortuna y tres paquetes de pipas. Lo que sobre para ti", me decía. Durante el pequeño trayecto que iba de mi casa al parque, iba visualizando cada esquina y cada rincón del quiosco en busca de mi pequeño tesoro de sábado. Siempre era muy difícil elegir y lo habitual era simplemente un chicle Cheiw, unos caramelos Sugus, unos Palotes de fresa o algún Diente de vampiro. El día que me sobraba más de la cuenta, no me interesaban ni las  cajas de cigarrillos de chocolate, ni ningún sobre de estampas de fútbol, ni ningún paquete de figuras de plástico, indios o vaqueros. Yo solo tenía un deseo, una aspiración, un objetivo claro de sábado: poder comprarme una bolsa de petazetas. Y rezaba para ello a mi manera. Le pedía al niño Jesús que me sobrara suficiente; que si eso pasaba, me portaría bien el resto de los días; que por favor, por favor, me sobrara lo suficiente. Y el día que eso pasaba, muy rara vez al principio, me convertía en el niño más feliz del barrio. Luego descubrí que podía hacer algo más: no esperar a la casualidad. Podía poner de mi parte: ahorrar el duro que mi padre me daba entre semana, para así tener siempre mis petazetas los fines de semana. Era entonces el niño más feliz del mundo.


Ahora, de adultos, el mundo sigue siendo el quiosco de doña Manolita. Está lleno de estímulos. Un día queremos una cosa y otro día queremos otra. Un día queremos un vestido, otro día un ordenador y otro un viaje. Pero realmente, en el plano vital, ¿sabemos lo que queremos? ¿Te has preguntado alguna vez hacia dónde se dirige tu vida? Deberíamos reflexionar sobre lo que verdaderamente queremos lograr, sobre lo que queremos conseguir. En definitiva, preguntarnos dónde están nuestros sueños. La felicidad consiste en tener un proyecto, un propósito de vida alcanzable, y la lucha por él nos genera ilusión y alegría. Si no sabes a dónde vas, ten la seguridad de que no llegarás a ninguna parte. Sitúate y hazte tres preguntas:

¿Dónde estás?
¿De dónde vienes?
¿A dónde vas?

La definición de tu objetivo es el inicio de todo logro. Para que sea eficaz, el objetivo debe ser específico, alcanzable, realista y calculado en el tiempo. Luego plantéate las opciones y alternativas que tienes, y analiza cómo cada una de ellas te afectará a ti y a tu entorno. Finalmente, establece un plan de acción, traza la hoja de ruta hasta llegar a tu destino y disfruta haciendo el camino. Ahí es donde reside la felicidad.

Busca tu "Objetivo Petazetas", sueña cómo llegar hasta él, piensa el camino y recórrelo. Te aguarda una explosión de felicidad. Mientras, te espero aquí, en las nubes.


domingo, 12 de enero de 2014

JAZZTHERAPY 3: DIEZ REGLAS PARA SER FELIZ

El mundo está lleno de estímulos. Olores por aquí, colores por allá, sabores en la mesa, ruidos por todos lados. Un caos para nuestra mente. Afortunadamente, nuestro organismo está diseñado para prestar atención solo a lo que nos interesa. Si no fuera así, si todo lo que llega a nuestro cerebro en forma de estímulo tuviéramos que traducirlo, no tendríamos suficientes conexiones neuronales para ello. De esta manera, nos encargamos de discriminar aquello que nos es útil, de forma consciente o inconsciente. Puestos a elegir conscientemente, yo desecharía aquellos estímulos que me proporcionan emociones negativas (ansiedad, tristeza, ira, enfado…), y me quedaría con los que me otorgan un estado de bienestar, con los que me ofrecen emociones positivas.

Aquí va una lista con diez maneras de fomentar esas emociones positivas, que nos ayuden a sentir la felicidad más cerca. Son las diez reglas para ser feliz.



1. SÉ CURIOSO. Sentimos atracción por la novedad y esto nos ayuda a relacionarnos con nuestro entorno. Es un tratamiento más eficaz que el prozac frente a la depresión y la ansiedad, y aunque a veces exige esfuerzo, claramente nos ayuda a crecer como personas.

2. HAZTE CREATIVO. Debemos ser capaces de plasmar nuestras ideas y sentimientos de la forma más creativa posible. Durante ese proceso, la mente se relaja y disfruta. Una persona creativa tenderá a encontrar soluciones novedosas a sus problemas. Buenas noticias, la creatividad se trabaja. Empieza ya.

3. EL DINERO NO DA LA FELICIDAD. Una visión consumista de la felicidad estará siempre insatisfecha. Necesitarás cada vez más dinero para obtener el mismo nivel de felicidad. Arranca esos mitos erróneos de tu subconsciente.

4. PIENSA EN POSITIVO. Busca la parte más positiva de cada situación o de cada persona. El optimismo repercute en la autoestima, en la confianza en las capacidades personales individuales y colectivas, y en general en las posibilidades de éxito como persona.

5. RÍETE Y TEN SENTIDO DEL HUMOR. Ambos nos permiten liberar tensiones, permiten relajarnos y olvidarnos momentáneamente de los problemas. La risa aumenta el sistema inmunológico, libera endorfinas, la hormona de la felicidad; libera serotonina, dopamina y adrenalina, las hormonas antidepresivas. Es un estímulo, por tanto, eficaz contra el estrés, la ansiedad y la tristeza. Ríete como un niño, sin complejos.

6. SUEÑA. Actúa y juega como si tus sueños ya se hubieran cumplido. Te acercarán a ellos de forma inevitable y liberarán a tu subconsciente de las limitaciones de la razón. Gracias a ello, te sentirás más creativo y encontrarás el camino para llegar hacia ellos. Súbete a las nubes, sé un soñador.

7. CAMBIA EL ENTORNO. Borra de tu alrededor aquellas cosas que no te aportan nada, te hacen perder el tiempo y te hacen disminuir tus niveles de energía. Detecta a aquellas personas que te consumen, que solo se acercan a ti para volcar su negatividad y hazles ver su conducta. Si continúan igual, no te cortes y cruza de acera cuando los veas. Son vampiros emocionales. Desaprende conductas y creencias que te hacen infeliz, son grandes herramientas de cambio. Ten tolerancia ante la frustración y los reveses, sabiendo que forman parte de la vida.

8. DISFRUTA DEL MOMENTO PRESENTE. La felicidad no es una meta futura, es un camino para llegar a ella. El deseo de tener y probar cosas nuevas hace que nuestra mente esté siempre en el futuro. Sin embargo, otra veces, estamos acordándonos del pasado. Sé consciente de lo que ocurre ahora en tu vida. Hay que evitar proyectarse tanto en el futuro y disfrutar de los cambios positivos que transcurren en el presente, por pequeños que sean. Tómate un té, serénate y disfruta.

9. MÍRATE AL ESPEJO Y GÚSTATE. ¿Qué ves cuando te miras al espejo? ¿Se parece tu ser real a tu ser ideal? Según los expertos en inteligencia emocional, el reto consiste en evitar que estos dos seres se distancien demasiado. Dicho de otro modo, que te conviertas en lo que quieres ser. Hay mucha literatura que te ayudará a cambiar y plasmar tus sueños en tu vida real. Lee.

10. FLUYE. Según el psicólogo Mihalyi Csikszenmihalyi, el concepto de fluir (flow) describe el proceso por el que una persona está absorta en una actividad que le produce gran satisfacción, perdiendo incluso la noción del tiempo y de cualquier estímulo externo. Según este investigador, es difícil ser felices si no tenemos experiencias de este tipo. De esta forma, la felicidad la alcanzamos cuando salimos del "trance flow". Para tener experiencias "flow" se deben cumplir algunas de las siguiente premisas: tener las metas claras, que sean realistas; tener una concentración intensa con un campo de atención limitado; pérdida de autoconciencia; sentido del tiempo distorsionado; mantener el equilibrio entre la habilidad y el reto dentro de la actividad, sin que sea demasiado fácil ni demasiado difícil; controlar personalmente la situación; y que sea intrínsecamente gratificante. Ya sabéis, a fluir.

Estas son solo algunas sugerencias para promocionar las emociones positivas y allanar el camino a la sensación de felicidad que todos deseamos. Ten este decálogo a mano, escríbelo con tu letra y repásalo cada poco tiempo. Como diría Albert Camus: "En lo más profundo del invierno, al fin aprendí que dentro de mí hay un verano invencible".

Sé feliz. Te espero en las nubes.

 Silvia Pérez Cruz y Javier Colina Trío

Para acabar esta tercera entrega de "Jazztheraphy", os propongo una bellísima versión de Silvia Pérez Cruz y Javier Colina Trío de la canción "Ella y yo", un bolero cubano. Lo escuchaba mientras escribía este post y me ha servido para tener una experiencia "flow".  Silvia Peréz Cruz es una joven cantante española que se dio a conocer al participar en la canción de la película Blancanieves de Pablo Berger, ganando el Goya 2013 a la mejor canción original. Javier Colina es un célebre contrabajista del panorama jazzístico español, que junto a Albert Sanz al piano y Marc Miralta a la batería, forman "Javier Colina Trío". En esta versión, les acompaña Perico Sambeat al saxo.
¡Que la disfrutéis!